martes, 6 de septiembre de 2011

Hace 5 años

Hace 5 años que te fuiste. Y no es que te lo esté recriminando. Son las reglas del juego, uno tiene que aceptar que en cualquier momento puede dejar de existir. Pero fue tan rápido, y tan temprano…
No niego que, cuando me tenga que ir, me gustaría que fuera incluso más rápido, pero uno es egoísta y no quiere desprenderse de lo que quiere. Que se le va a hacer, así es la naturaleza humana.
Se que no vas a estar leyendo esto (tengo claro eso de “del polvo venimos, al polvo vamos”) pero creo que las personas que uno quiere viven mas en los recuerdos que en su existencia material. Y así como a veces te sigo comentando cosas, aprovecho ahora para decirte que te sigo extrañando. Ya no duele tanto, me suelo acordar más con una sonrisa en mi rostro que con lágrimas en los ojos, pero quisiera que siguieras acá. Me hubieses gustado que me vieras más grande, mas maduro, ya casado. Pero mas lamento que no puedas ver todo el camino que todavía me falta recorrer, no solo lo que soy, sinó todo lo que me falta ser.
Te extraño papi, pero la vida es así, amarga y dulce a la vez. Supongo que ya lo sabías.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.